El teletrabajo en España ha experimentado altibajos significativos en los últimos años. La pandemia impulsó esta modalidad como nunca antes, pero en 2024 la realidad es algo diferente.
En la actualidad, un 15% de la población activa trabaja desde casa de forma ocasional o habitual, con una media del 7,6 % haciéndolo la mayor parte de los días laborales, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA).
Si bien el teletrabajo ha perdido algo de impulso respecto a sus picos pandémicos, está claro que sigue teniendo un lugar importante en el mercado laboral español.
La tendencia del teletrabajo en España: hacia un modelo híbrido
En el segundo trimestre de 2024, según el informe “IV Radiografía del Teletrabajo en España – septiembre 2024” de Infojobs, más de 1,6 millones de personas en España teletrabajaban la mayoría de sus días laborales, una cifra ligeramente superior a la de 2023.
A esta cifra se suman 1,5 millones de trabajadores que practican el teletrabajo ocasional, lo que eleva el número total de personas que, al menos en parte, trabajan desde casa. Esta situación no solo ha transformado la forma de trabajar, sino que ha influido en decisiones como la contratación de un seguro para la casa, una medida importante para quienes pasan una gran cantidad de tiempo en su domicilio y desean proteger su entorno laboral.
A pesar de esta ligera recuperación, los números aún están lejos de los alcanzados en 2020, cuando más del 16 % de los ocupados teletrabajaba. Hoy, las empresas prefieren los modelos híbridos, donde los empleados combinan días de trabajo en la oficina con otros en casa.
Comparativa europea: un reto por alcanzar
Comparado con el resto de Europa, España se encuentra por debajo de la media de la Unión Europea en cuanto a teletrabajo. También según los datos recogidos en el informe de Infojobs, mientras que el 9% de los trabajadores de la UE teletrabajan, en España esta cifra es de un 7%.
Este porcentaje queda muy por detrás de países como Finlandia o Irlanda, donde más del 20% de los ocupados trabaja de forma remota. Sin embargo, nuestro país supera en teletrabajo a otros estados del sur de Europa, como Italia o Grecia, y a la mayoría de los países del este, donde el teletrabajo es aún menos frecuente.
En este sentido, el crecimiento moderado del teletrabajo en España apunta a una cultura laboral que se adapta a esta modalidad de forma gradual.
Ventajas y desafíos del teletrabajo en España en 2024
El teletrabajo, impulsado por el avance de la tecnología, ha abierto la puerta a un nuevo modelo conocido como smartwork, que integra herramientas digitales avanzadas y sistemas de colaboración online. Las ventajas que ofrece son evidentes: desde la mejora de la conciliación laboral y personal, hasta el ahorro de tiempo en desplazamientos.
Sin embargo, esta dependencia de la tecnología también plantea desafíos, como la necesidad de una ciberseguridad sólida para proteger datos sensibles y evitar intrusiones no deseadas. La implementación de buenas prácticas digitales y la actualización constante de los sistemas de protección se han convertido en aspectos esenciales en el entorno de trabajo remoto.
De cara al futuro, la consolidación del teletrabajo dependerá en gran medida de la adaptación cultural y estructural de las empresas en España.