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¿Oficina o coworking?


Susana Palacios / Madrid

Desde finales de 2019 los espacios de coworking están en auge. Cada día más empresas se deciden por usar estos espacios en lugar de una oficina propia. Pero que es mejor para tu negocio, ¿oficina o coworking?

Cuando vas a empezar tu negocio, o lo tienes ya en pleno funcionamiento, todo influye. Por eso mismo una de las incógnitas es desde donde se llevará a cabo la actividad.  Cada negocio tiene unas necesidades propias que son las que indican lo que es más necesario para cada tipo de negocio.

Con la llegada del Covid19, llegó también el teletrabajo. A partir de este punto, muchas empresas se dieron cuenta que no era necesario al 100% el estar todos en la oficina. También se podía trabajar desde casa. Y empezaron a emplearse los coworking.  Espacios destinados a empresas, pymes y emprendedores con formato de oficina compartida.

Pero a la hora de elegir qué espacio es más beneficioso para tu negocio ¿oficina o coworking? Es necesario valorar todos los factores que podrían influir. 

Cuando se decide por una oficina propia, los gastos son realmente elevados. Todo corre por cuenta de la empresa. En cambio, en un coworking solo se paga por el espacio. El resto de gastos corren por cuenta del negocio. Supone una inversión mucho menor, tanto en trabajadores, como productos y servicios. 

Si te decide por tener tu propio espacio, los horarios los elegirás tú. Las horas que permanecerá la empresa abierta. En cambio, en los espacios compartidos hay un horario al que es necesario adaptarse. 

El ruido y la privacidad son otros de los factores que son necesarios valorar, en una oficina propia siempre va a haber mucha más privacidad y todos los temas que se traten serán en torno al negocio. En muchos coworking esa privacidad no existe, pero sí que es cierto que hay zonas habilitadas para ello.

Otra clave es la ubicación donde se quiere establecer el negocio. Posiblemente muchas de las zonas se encuentren fuera del presupuesto para establecer una oficina propia. Pero un coworking es mucho más accesible y supone una inversión menor, pudiendo así establecerse en cualquier zona.

El espacio es algo muy importante a tener en cuenta. Cuando te decides por una oficina el espacio es el que es, y en el momento en el que se queda pequeña es necesario trasladarse. En los espacios compartidos, se adaptan a las necesidades década uno y no hay necesidad de estar cambiándose de ubicación.

La necesidad de una oficina también supone una inversión inicial, la cual es probable que no se pueda hacer frente. Es necesario pagar el lugar, adaptarlo a todas las necesidades, invertir en la decoración y equipamiento. Por el contrario, un coworking ya dispone del espacio y decoración. Una inversión inicial mucho menor, que permitirá invertir en otras necesidades.

Todo esto son factores clave a tener en cuenta a la hora de decidir donde se va desarrollar la actividad. Incluso con la modalidad híbrida que se está viviendo actualmente.  En la mayoría de negocios el teletrabajo y la presencialidad es un 50/50. Por lo que es un espacio que durante la semana solo la mitad asistirá cada día. Esto supone que no sea necesario lugares tan grandes como hace algunos años.

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